Resumiendo

1. La casera, Pili Abellá (maldita sea), nos ha echado del apartamento. ¿Razones? Ninguna. No hemos hecho más que soportar sus largas horas de monólogos, sus quejas sin sentido, sus órdenes, sus excusas por no poner la luz y el agua ( nos duchábamos con agua helada del grifo de la cocina y un cubo y usábamos velas para ver algo, DURANTE UNA LARGA SEMANA)...
El caso es que ella no quería que firmásemos el contrato hasta que encontrásemos un tercer inquilino para el salón, quería sacar 1.500 pavos al mes a toda costa). Bueno, nos dispusimos a ello, nos encargamos nosotras de buscar a gente, hicimos las entrevistas nosotras mismas, etc. Conocimos a un chico muy majo español, le hicimos la entrevista y parecía que todo iba bien. Pues bien, al día siguiente al volver a casa le vemos a él con dos personas más (sospechoso, ¿verdad?) y, esa misma noche, la casera buscó cualquier excusa para ponerse a gritar como loca y nos dijo que a la mañana siguiente nos quería fuera. Salió por la puerta... Mi primera reacción fue ponerme a llorar, ¿ahora dónde me metía? Después me dí cuenta de que en realidad era lo mejor que me podía pasar puesto que tener como casera a esa señora iba a darme muchos problemas, y nos dio un ataque de risa. Nos pusimos a hacer la maleta a toda pastilla, metiendo las cosas a piñon; tiré algunas cosas suyas por el balcón, le escribimos una nota y nos fuimos.

Albergue juvenil

Con todo el marrón de maletas tomamos el metro hasta Nation, donde nos esperaba Alfonso (bendito sea). Esa noche dormimos en un albergue de jóvenes y al día siguiente nos vinimos a casa de Alfonso ya que su compañero de piso, un italiano que se llama Claudio, se ha ido de viaje esta semana. Y aquí estamos.

Esa es la historia, me guardo muchos detalles porque sería interminable...

2. Solución a punto 1. ¡Nos hemos quedado en la calle! A buscar techo. Me pasé la mañana enviando solicitudes y llamando a gente. Contacté con dos personas y fui a ver los pisos por la tarde.
Un hombre de unos 40 años, marroquí. Aguita. La casa apestaba a especias y todo era muy...árabe. El payo, raruco, raruco. Tanto que Fani y yo estábamos pendiente del pomo de la puerta por si teníamos que salir corriendo.
Después conocí a la que va a ser mi compañera de piso: Rosalie, francesa, unos 30 tacos, maja. He alquilado su salón. Solución temporal, demos gracias.

A comernos el mundo

3. El curro. He echado muchíiiiiisimos CV's, pero de momento solo he hecho una entrevista. Buenas sensaciones, pero no me han llamado aún, no sé... Ya veremos.
Esta mañana hemos ido por hoteles super pijos echando CV's, buscando los Sol Meliá a ver si al ser españolas se apiadan de nosotras. Hasta hemos ido a la agencia de viajes de El Corte Inglés, que también nos ha recomendado postular para Air Europa.

Bueno, al final me ha quedado un resumen un poco largo, pero os aseguro que es resumen xD

Estoy bien. Os quiere, te quiere,

Fille Samaritaine